Por Experiencia

Si eres de las personas que te gusta la exploración y la practicas en la montaña, nos gustaría compartir algunas experiencias que han ayudado en nuestras averiguaciones previas.

Primero hay que recordar que el tipo de navegación que practicamos es totalmente visual, comparamos lo que vemos con lo que sabemos que existe, hay que tener cuidado en no querer ver lo que sabemos con lo que vemos.

Es decir, muchas veces pensamos que estamos en un lugar que conocemos y por algunas semejanzas geográficas ó de vegetación creemos que estamos en ese lugar, pero nos queda la duda. Al salir a explorar, esta duda debe ser un riesgo calculado en lo posible, aunque nos gusta perdernos, también gustamos de llegar a casa seguros. Conforme inviertes tiempo en la exploración, te vuelves adicto a la recompensa de conocer más y más kilómetros de veredas, pero, contrario a lo que muchos piensan, lo que más te enseña de una exploración es el fracaso, no llegar al destino, tiene un sabor amargo y de angustia que con el tiempo lo recuerdas como una aventura divertida. Hay que saber en donde nos equivocamos y porqué, para no repetir el mismo error.

Para reducir el riesgo de perderse hay instrumentos que ayudan a localizarnos, saberlos usar e interpretar tiene su ciencia pero te permitirá gozar de una forma segura la exploración.

Los básicos son el mapa y la brújula, para aplicarlos debidamente se requiere de la práctica en campo. No puedes imaginar la cantidad de información que contiene una carta topográfica, localización, vegetación, elevación, hidrografía, comunicaciones, poblaciones, servicios, y más. Cuando comparas lo que conoces de la región con el mapa, encuentras información que te describe ese lugar en las diferentes épocas del año, te ayuda a planear mejor tus salidas, donde hidratar, descansar, comer, dormir, esconderte, en donde resguardarte en caso que el clima te sorprenda.

Otros instrumentos que te ayudan a ubicarte pero no considerados como básicos, son el altímetro y el GPS, estos dos instrumentos ayudan principalmente a que confirmes tu elevación y posición en una carta topográfica. Debido a las bondades del GPS, han ido evolucionando y mejorando su precisión.

La combinación de todas estas ayudas en la navegación te permitirán reducir el riesgo de perderte. Su uso varía de cada quién y cómo lo practique, hay quiénes siguen una ruta pre -establecida y hay quienes se aventuran a conocer el final de una vereda y luego buscan su posición. Creemos que todas las formas de navegación son válidas mientras puedas en cualquier momento saber tú localización.

El barómetro es otro instrumento útil pero está mas relacionado con el clima. Te indica la presión atmosférica del lugar donde te encuentras. Su interpretación más general es: a mayor presión atmosférica menor probabilidad de precipitación, si registras los valores de la presión atmosférica periódicamente y observas una tendencia ascendente en dichos valores, significa que es poco probable que llueva, por el contrario, al mostrar los valores una tendencia descendente hay que tomar en cuenta la posibilidad de lluvia.

Es importante saber que tipo de presión atmosférica se registra, si es absoluta o relativa. Si no sabes que presión indica tu barómetro es posible que pronostiques lluvia en un recorrido donde asciendes cientos de metros en un día totalmente despejado.

Las nubes también nos dicen mucho acerca de la lluvia o tormentas eléctricas, indican dirección y velocidad del viento. Es interesante conocer los diferentes tipos de nubes que se forman y como se clasifican de acuerdo a su altura.

La flora es otro indicador del comportamiento del tiempo, puedes estimar a largo plazo (meses) las lluvias que la naturaleza espera.

¿Sabías que los troncos que quedan de los árboles talados te pueden indicar la dirección del norte? al observar en el corte, las diferentes capas de la corteza, los aros concéntricos más separados están orientados hacia el sur.

La interpretación de todos estos elementos en conjunto, es lo que nos motiva a seguir explorando y entender mejor el entorno en el que vivimos, conocer sus virtudes, sus secretos y apreciar su belleza en cada época del año, así como saber identificar y respetar sus riesgos.

Casi como a las mujeres.

Ride With Freedom = Rodando con Libertad

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